Clinton anuncia medidas inmediatas para luchar contra la piratería somalí

La jefa de la diplomacia estadounidense enumeró en declaraciones a la prensa cuatro iniciativas que el Gobierno del presidente Barack Obama implementará de inmediato.

En primer lugar, Washington enviará un representante especial a la conferencia internacional para el mantenimiento de la paz y el desarrollo en Somalia, que se celebrará próximamente en Bruselas, explicó Clinton a la prensa.

El enviado trabajará con los socios de Estados Unidos para conseguir que el país africano contribuya a los esfuerzos internacionales por eliminar las bases de los piratas en su territorio y reducir los incentivos que alientan a los jóvenes varones somalíes a unirse a estas bandas "criminales", explicó.

En segundo lugar, Clinton hizo un llamamiento para que se convoque de inmediato una reunión de los socios de EE.UU. en el grupo de contacto sobre piratería encabezada por Washington para "desarrollar y ampliar" una "respuesta multinacional".

"La respuesta a nuestra petición inicial a través del grupo de contacto a las naciones para que aportaran barcos para patrullas de vigilancia ha resultado ser muy exitosa, pero ahora necesitamos una mejor coordinación", señaló.

El área afectada, el Océano Índico y el Golfo de Adén, cuadruplica el tamaño de Texas, "de manera que tenemos que ser capaces de trabajar juntos para evitar a los piratas", afirmó.

En opinión de la jefa de la diplomacia estadounidense, la comunidad internacional también debe garantizar la liberación de los barcos y las tripulaciones actualmente secuestradas y "explorar la localización y congelación de los activos de los piratas".

Como tercera medida, la titular del Departamento de Estado ha encargado a un equipo diplomático que involucre al Gobierno Federal de Transición somalí y a los líderes de Puntlandia, región semiautónoma de Somalia que concentra el 99% de los incidentes de piratería en el norte del Índico, en la lucha contra este problema.

"Presionaremos a estos líderes para que actúen contra los piratas que operan desde bases ubicadas en sus territorios", explicó.

La última medida anunciada hoy por Clinton consiste en trabajar con las navieras y el sector de las aseguradoras para resolver las "lagunas" existentes en las medidas de la defensa propia.

Los recientes ataques de los piratas a varios barcos exigen "que actuemos rápidamente y decisivamente para combatir esta amenaza", recalcó la secretaria de Estado.

"Los piratas son criminales. Son bandas armadas en el mar. Y aquellos que cometen ataques tienen que ser detenidos y aquellos que los ejecutan tienen que ser llevados ante la Justicia", destacó.

Clinton reiteró que la comunidad internacional trata con un delito del siglo XVII, pero que requiere "soluciones del siglo XXI", y señaló que las medidas anunciadas hoy formarán parte de una estrategia a largo plazo que desarrolla el Gobierno.

De hecho, el viernes se reunirá un grupo intergubernamental de expertos de los departamentos de Defensa, Justicia, Seguridad Nacional y de Transporte, así como de los servicios de inteligencia para "evaluar los recientes eventos y posibles respuestas", explicó.

No obstante, advirtió que las nuevas medidas no significan que su país vaya a cambiar su posición respecto a las negociaciones con los piratas.

"Dejen que subraye este punto: Estados Unidos no hace concesiones o pagos de rescate a piratas", enfatizó.

La enérgica respuesta estadounidense a la piratería se produce después de que piratas somalíes retuvieran durante varios días al capitán de la marina mercante Richard Phillips.

Phillips fue capturado el miércoles de la semana pasada después de que cuatro piratas asaltaran el carguero "Maersk Alabama", en el que viajaban 20 marineros, y fue liberado el domingo.

El secuestro conmocionó a los estadounidenses y mantuvo ocupado durante varios días a todo el Gobierno para tratar de lograr su liberación.

También se produce un día después de que otros piratas atacaran el carguero con bandera estadounidense "Liberty Sun".