Salman Abedi, el niño que se convirtió en un terrorista suicida

El terrorista suiciada de Mánchester, Salman Abedi estaba controlado por los servicios de inteligencia británicos, pero no lo consideraron alguién capaz de provocar una masacre como la del Manchester Arena. El joven de 22 años podría haber viajado a Siria y tendría vínculos probados con el Estado Islámico, según ha revelado el ministro del interior francés. Abedi también estuvo varias veces Libia, el país de origen de sus padres. Regresó de su última visita al país norteafricano unos días antes de cometer el atentado Junto a sus restos se encontro su documento de identidad. Los que le conocían coinciden en que el chico introvertido de la pandilla, buen futbolista y esporádico consumidor de cannabis había cambiado en los últimos tiempos. También en sus creencias religiosas, cada vez más radicales. Los investigadores creen que contó con ayuda tanto para fabricar la bomba como para planificar el atentado. Esta mañana se han realizado tres nuevas detenciones en el sur de Mánchester relacionadas con el ataque terrorista.