En total se trata de 14 civiles y una decena de policías heridos por la detonación de la bomba, colocada en un paso elevado a la espera de la llegada del autobús, que ha quedado prácticamente destrozado, aunque no se tiene constancia por el momento de víctimas mortales.
Los heridos han sido trasladados a los hospitales de Kiziltepe y Estado de Mardin, mientras las fuerzas de seguridad turcas han iniciado una operación a gran escala tras el incidente, según las mismas fuentes.