Equo aspira a cinco escaños pensando en el voto de los indignados y desencantados del nacionalismo vasco y español

El presidente del partido ecologista Equo, Juan López de Uralde, ha asegurado que su formación aspira a lograr cinco escaños en las elecciones del próximo 20 de noviembre mediante la captación del apoyo de los indignados del 15-M y de gente desencantada con el nacionalismo vasco y español.

En una entrevista concedida a Onda Vasca, recogida por Europa Press, el ex presidente de Greenpeace ha señalado que Equo es "un partido, no en busca de votantes, sino votantes construyendo un partido", y se muestra convencido de que, "desde el desencanto y el desencuentro con las actuales organizaciones políticas de izquierda", puede haber personas que encuentren en su organización una "alternativa atractiva".

De momento, se han adherido a Equo un total de 35 organizaciones verdes y progresistas, con lo que cuentan ya con más de 100 concejales y representación parlamentaria en Baleares, a través de Iniciativa Verds, y Valencia, con Compromís, por lo que estiman que podrán lograr, tras los comicios, cinco diputados.

De hecho, ya han atraído a gentes procedentes del mundo de la política, como la ex-parlamentaria de IU en la Asamblea de Madrid Inés Sabanés, o el ex-director general de Salud Pública del Gobierno del PSOE, Ildefonso Hernández, de la ayuda al desarrollo como Leticia Carballo, y de la ecología como el presidente de la sociedad española de ornitología, Alejandro Sánchez.

MEDIDAS DE ZAPATERO

Sobre las medidas planteadas por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y que este martes defenderá en pleno, López de Uralde ha afirmado que Equo es "radicalmente contrario" a esas propuestas porque suponen "promover recortes sociales para recortar gasto público".

Según ha explicado, si fuera necesario reducir el gasto, su formación propondría recortar otras partidas, "como armamento o infraestructuras, que tienen gran impacto medioambiental y alto coste y que, en muchos casos, sería un coste más factible con menos impacto social que lo que está haciendo ahora el Gobierno".