Junta de Andalucía espera que Rajoy reciba rápidamente a Díaz y haya lealtad y colaboración entre los dos gobiernos

En declaraciones a Canal Sur Radio recogidas por Europa Press, Susana Díaz ha señalado que desde el primer momento, la presidenta ha dejado clara su voluntad de lealtad y colaboración con el Gobierno de la Nación, porque Andalucía no quiere la "confrontación", aunque no dudará en defender a ultranza los intereses de esta tierra.

Ha señalado que la Junta de Andalucía ha "tendido la mano" la mano al Gobierno central y ha considerado fundamental que esta comunidad participe en las grandes decisiones de España y tenga el trato que merece.

"Hay una voluntad sincera de diálogo, como lo hemos mostrado por activa y por pasiva", según ha expresado el consejero andaluz de Presidencia, quien ha señalado que aunque Andalucía no está de acuerdo con el objetivo de déficit, lo va a cumplir.

Asimismo, ha señalado que el PP-A tiene que entender que la crispación no ayuda ni aporta nada y que la gente empieza a estar cansada de las disputas. "Tiene que entender que esa forma de hacer política no conduce a ninguna parte", según Jiménez Barrios, para quien el Partido Popular tiene que hacer la reflexión de que tiene "que dejar de hablar de lo que únicamente le ocupa y empezar a hablar de los problemas de los ciudadanos si quiere ser de verdad una alternativa de gobierno creíble".

Jiménez Barrios ha querido dejar claro que la "mirada" del Gobierno andaluz no está ahora mismo en la celebración de unas elecciones autonómicas, sino en atender los problemas de los ciudadanos y hacer posible la reactivación económica en la comunidad.

El consejero, que ha destacado la celeridad con la que el nuevo Gobierno andaluz ha empezado a trabajar, se ha mostrado convencido de que en esta comunidad hay bases para un gran acuerdo por el desarrollo económico de Andalucía, a partir de los numerosos conciertos sectoriales que ya se han firmado.

Ha recalcado que Andalucía cuenta con un Gobierno "estable, sensible, duradero y eficaz", caracterizado por una relaciones "normales, desde el diálogo" entre PSOE-A e IULV-CA. Ha augurado que la coalición de la izquierda va a seguir funcionando "engrasada", algo a lo que él mismo se va a dedicar en "cuerpo y alma".