Asociaciones de memoria histórica apoyan la exposición del Parlamento navarro

Asociaciones que trabajan por la memoria histórica han manifestado su "apoyo" a la exposición 'Navarra-1936-Nafarroa', que acoge el Parlamento de Navarra y que exhibe 36 cuadros de José Ramón Urtasun sobre la Guerra Civil, y han defendido que en ella "no hay nada que ofenda".

En concreto, la Asociación de Familiares de Fusilados de Navarra, Autobús de la Memoria y la Coordinadora Navarra de Pueblos por la Memoria 'Amapola del Camino' han señalado, a través de una nota, que consideran "desmesurada la crítica y la actuación que desde ciertos sectores se está ejerciendo sobre ella, tratando de crear polémica donde no la hay". "Es cierto que han pasado muchos años y no han ayudado a que lo ocurrido, que fue mucho más de lo que reflejan esos cuadros, fuera esclarecido y debidamente juzgado", han defendido.

Estas asociaciones han indicado que "la magnitud de lo que aquí ocurrió y la impunidad de aquellos desmanes y delitos que salpicaron a toda la sociedad penetró y se filtró a nuestro AND siendo guardado por todas aquellas familias que lo sufrieron y estudiada por todos aquellos que en buena hora se hicieron la pregunta correcta: ¿qué ocurrió en la guerra?"

Asimismo, han señalado que "nadie de esta Comunidad debería sentirse indignado por lo que se puede ver en la muestra del Parlamento, al revés, deberían sentir vergüenza y plantearse por qué no han sido posibles otras tantas que nos mostraran lo que ocurrió". "Lo que el espectador puede contemplar es el tumor que durante estos lustros ha comprimido la parte del cerebro donde se ubica la memoria. Esta Comunidad padece de una enfermedad vergonzosa a la que José Ramón Urtasun ha puesto nombre: amnesia selectiva, una amnesia que no tiene nada de casual", han asegurado.

Según estas asociaciones, "aquí unos siempre quisieron borrar lo ocurrido, porque recordar duele, avergüenza o pone en evidencia, como se comprueba ahora, pero la barbarie que aquí ocurrió se ha trasmitido de generación en generación y es esa transmisión silenciosa e invisible la que ahora grita entre esas cuatro paredes del atrio del Parlamento".

"Si no quieren oírlo que no lo oigan, pero que no impidan que quien quiera lo haga. Los que padecieron esos horrores saben que la memoria es la mejor arma contra la impunidad y el silencio, y es eso y solo eso lo que irrita a algunos sectores de esta ciudadanía", han añadido.

PARA LAS NUEVAS GENERACIONES

Por otro lado, han destacado que "son solo cuadros que pretenden contar, especialmente a las nuevas generaciones, quiénes fueron los protagonistas de aquella barbarie" y ha apuntado que "quienes mantuvieron la dictadura saben de sobra lo que hicieron y quienes la padecieron también lo saben, del mismo modo que las autoridades de los años posteriores no respondieron a lo que una sociedad realmente democrática esperaría de ellos".

"Y esto irrita e irrita mucho", han agregado las asociaciones, que han afirmado que "por ello, en los años de la dictadura franquista tomaron muchas medidas protectoras para salir indemnes". "Lo mismo ocurrió a finales de los años 70 cuando se llevaron a cabo las exhumaciones por diferentes lugares de Navarra. Ahora, después de tantos años de ocultación, surge la indignación de quienes aún pretenden seguir ocultando lo ocurrido y sus responsabilidades pasadas y actuales", han dicho.

Según las agrupaciones, "no hay nada que ofenda en esta exposición, lo que ofende es la impunidad y el olvido". Así, han opinado que "cada uno puede ver lo que esté preparado para ver" y han considerado que "es aquí donde radica el problema". "Mientras unos dicen ver odio, amenazas e injurias otros vemos los asesinatos, los secuestros, las desapariciones, los robos y las humillaciones ocurridas, y, sobre todo, enormes dosis de injusticia, impunidad y maldad", han remarcado.

Finalmente, han abogado por "hablar de ello" y "dar conocer lo que pasó" porque "nos hará bien". Mientras, han concluido, "esperamos que se cumpla la ley y se consiga la reclamación de verdad, justicia y reparación que nos une". Además, han deseado que "la inolvidable jornada vivida el 17 de abril en el atrio del Parlamento de Navarra", en la que se celebró un acto de reconocimiento a los 156 representantes públicos que fueron asesinados tras el golpe de Estado de 1936, "sirva de punto de apoyo para conseguirlo".