WWF considera que el dictamen de Bruselas "es el último clavo del ataúd" del dragado del Guadalquivir

La asociación conservacionista WWF ha señalado que el expediente de la Comisión Europea a España por el impacto del dragado del Guadalquivir en Doñana "es el último clavo del ataúd" de este proyecto, que Ecologistas en Acción Andalucía considera una obra "socialmente injusta, ambientalmente insostenible y económicamente desastrosa".

Así, el coordinador técnico de la Oficina de WWF en Doñana, Juan José Carmona, ha indicado a Europa Press que celebran que la Unión Europea haya tomado esta decisión "a raíz del procedimiento que WWF inició en su momento contra el dragado del Guadalquivir", toda vez que consideran que este dictamen "es el último clavo del ataúd del dragado", que se ha demostrado que "es contrario a la normativa comunitaria de protección de la naturaleza".

Además, Carmona señala que se viene a sumar a la reciente sentencia del Tribunal Supremo que "decía que no era tampoco acorde a la normativa española". Por tanto, al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente "se le acaban las excusas" para "no retirar la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) y enterrar definitivamente este proyecto".

Además, WWF considera que ahora deben sentarse Ministerio y Junta y poner sobre la mesa "de manera urgente" propuestas del plan de recuperación del Guadalquivir "para discutirlo con los agentes sociales y económicos del estuario", y que "se pueda empezar a construir un Guadalquivir, que lo que pretendía el puerto era cargárselo". "Ya no quedan excusas y no le quedan apoyos a este proyecto, que se debería meter en un cajón para siempre", concluye.

"SE ESTÁ DEMOSTRANDO QUE LO RAZONABLE ES NO HACER EL DRAGADO"

Por su parte, la portavoz de Ecologistas en Acción en Andalucía, Lola Yllescas, ha expresado su "felicitación" ya que "las personas razonables están demostrando que lo razonable es no hacer el dragado", toda vez que recuerda que desde la organización ecologista siempre se ha dicho que el dragado "es una obra socialmente injusta, ambientalmente insostenible y económicamente desastrosa".

Además, la portavoz manifiesta, en declaraciones a Europa Press, que tras la última sentencia del Tribunal Supremo y ahora este nuevo dictamen de Bruselas, "parece que los europeos y los jueces conocen la Directiva Marco del Agua mejor que nosotros y que tienen más sensibilidad para la conservación de Doñana y nuestro medio ambiente".

Por tanto, Yllescas concluye que se trata de una obra que "no aporta beneficios" y que "está muy bien que no se realice" porque, a su juicio, "las argumentaciones no son razonables y económicamente es un disparate mantenerla".

Además, asegura que se han dicho "muchas falacias y mentiras" sobre la posibilidad de dragar, y apunta que el dinero destinado a este proyecto "no se va a perder", porque el dinero de Europa "no era finalista, no especialmente para el dragado, sino que se daba al Gobierno de España, y si no es aquí se invertirá en otra cosa".