El ex dictador Gregorio Álvarez se define como un demócrata y sin arrepentimientos

El teniente general retirado está preso en una cárcel militar de Montevideo acusado de "co autoría de homicidio" por la desaparición de 37 personas durante la dictadura que gobernó en Uruguay entre 1973 y 1985.

Álvarez estuvo al frente del Gobierno uruguayo, con mano dura, a partir de septiembre de 1981, pero antes, entre 1974 y 1978, fue el jefe de la División de Ejército IV que controla el este del país.

"A mí me adjudicaron 37 muertos. He pedido pruebas y testigos cuatro o cinco veces y nada. Aparte cuando desaparecieron esos 37 yo no estaba en Montevideo ni tenía mando, yo estaba al frente de la División Ejército IV y, sin embargo, me los adjudicaron", afirmó Álvarez en declaraciones dentro de prisión al diario Últimas Noticias.

El ex dictador dijo que vive el "síndrome del ataúd".

"Si cumplo con todos los años que me aplicaron, voy a salir con 107 años, así que me hice a la idea de morir acá (en prisión)", agregó.

Tras destacar que Uruguay "vivió una guerra interna", "Goyo" Álvarez, como se le conoce, afirmó que no tiene información sobre el destino de los uruguayos detenidos-desaparecidos.

Aseguró que quiere "colaborar" con la paz en Uruguay "por eso se mantiene callado, agregó.

El ex dictador se refirió al actual jefe de Estado uruguayo, José Mujica, ex líder guerrillero y que estuvo preso en duras condiciones antes y durante la dictadura, como "nuestro presidente".

"Yo no me hago responsable de las cosas malas que me adjudican. Déjeme pensar de qué me puedo arrepentir. Que yo recuerde, de nada", agregó el ex dictador en el reportaje.

Álvarez comparte prisión con otros militares retirados igualmente procesados por violaciones a los derechos humanos durante la dictadura.