La popularidad de Nicolás Sarkozy sigue bajando y así lo demuestran las encuestas. Ejemplo del deterioro de su imagen era el episodio que vivía el presidente de la Republica Francesa, en lo que pretendía ser un acto con el público para ganar puntos.
Sarkoky ofrece su mano sin cesar, porque nunca se sabe dónde puede estar la foto de portada. Hasta que se topa con lo que parece ser un simpatizante de la oposición. El hombre le espeta: "no me toques, que me ensucias". Y Sarkzy responde algo barriobajero: "pues entonces pírate, imbécil". Un insulto que otros han traducido por otra palabra española que suena mucho más fuerte porque empieza con 'g', un sonido muy brusco.
El gesto de Sarkozy se vuelve tenso, eso sí, sin perder la sonrisa porque las cámaras siguen grabando. Un nuevo capítulo para empeorar su imagen pública, bastante dañada desde que comenzara su relación con Carla Bruni.
Para colmo, el culebrón Sarkozy continúa dando de qué hablar. Hace unos días, el presidente francés denunciaba por 'falsedad' a una revista que publicaba que el político había enviado, días antes de su enlace con la Bruni, un mensaje a su ex mujer en el que, supuestamente, le confesaba que si ella volvía lo dejaría todo. El juez ha llamado a Cecilia a declarar para comprobar la veracidad de esta información.