Unas imágenes brutales sin demasiada nitidez

TELECINCO.ES 09/10/2008 09:45

Cómo sucedió

Son las tres y media de la madrugada de un frío 27 de enero de 2002. Es sábado y en el Maremagnum de Barcelona hay mucha gente de fiesta. Según vemos a la derecha de las imágenes captadas por las cámaras de seguridad, un grupo de ecuatorianos formado por Wilson Pacheco, su hermano, su cuñado y un amigo quieren entrar en la discoteca Caipiriña pero, los porteros les niegan la entrada, le ven demasiado bebidos.

De las palabras pasan a las manos y muy pronto a los empujones en los que un portero cae al suelo. En ese momento la cámara gira y quién está en el suelo es Wilson quien a pesar de su metro y medio de estatura se encara con dos vigilantes del Maremagnum mucho más corpulentos que él. Los vigilantes intentan mediar en la pelea y piden a los ecuatorianos que abandonen la zona. Uno de ellos, es Antonio Fernando Quincoces.

Las provocaciones continúan y Wilson lanza varios objetos cortantes sobre David Gascó, el otro vigilante que se encontraban allí pero, que en ese momento todavía no tenía su placa. Esa sí, será la provocación que llevará a Wilson a la muerte. David no quiere que se le reconozca ya que cinco años después del incidente se encuentra en libertad tras haber sido retirados todos los cargos contra él. Las imágenes demuestran que no participa en la paliza que se le propina al ecuatoriano.

Siete personas entre porteros y vigilantes persiguen a Wilson por una pasarela flotante sobre el mar. Tras propinarle una brutal paliza, en la que Pacheco intento defenderse, llegó a la escena el portero del bar al que quería entrar Wilson, es James Anglada que levanta al ecuatoriano del suelo mientras que Mariano Romero le asesta un último golpe en la cabeza. Finalmente, James arroja al hombre al mar.1

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