Tras marcar el decimoséptimo mejor tiempo tras 16 vueltas al trazado asiático, el valenciano explicó que el dolor "hace que el cuerpo busque posturas que lo atenúen y de este modo se pierde técnica en el pilotaje". "Lo más molesto son los pinchazos en las costillas, que me hacen no poder ser agresivo encima de la moto", añadió el de Dos Aguas.
Este dolor hizo necesario que Barberá, que marcha undécimo en la clasificación del Campeonato del Mundo, corriera infiltrado durante la sesión de la tarde, en la que marcó un tiempo de 2.04.603.
Pese a los inconvenientes, el pupilo de Aspar se encomendó a los ejercicios de recuperación de la zona afectada durante estos días previos a la carrera. "Voy a intentar trabajar con mi fisioterapeuta para mejorar y mañana poder seguir entrenándome", comentó. Con su habitual optimismo, el de Dos Aguas se mostró contento "por subir a la moto e ir recuperando el 'feeling'".