Marc Márquez, siete de siete en Montmeló

telecinco.es 15/06/2014 14:49

Fue una bonita batalla la que se vivió en el Circuit de Barcelona-Catalunya, primero con las dos Honda y las dos Yamaha oficiales, después entre Márquez y Pedrosa, que pasaron a Rossi para luchar entre ellos por ganar en casa, por ganar ante sus aficionados. Se llevó el gato al agua el actual líder del Mundial, aunque precisamente la amenaza de lluvia, finalmente con unas únicas cuatro gotas, fue protagonista.

En la última vuelta, el baile entre Pedrosa y Márquez fue espectacular. Se pasaron el uno al otro en varias ocasiones, hasta cinco veces. En esta ocasión, Pedrosa no se rindió y estuvo batallador como nunca este año, poniéndose a la estela del de Cervera. Pero se acercó tanto que a punto estuvieron de irse al suelo ambos, con el de Castellar rozando el neumático trasero del de Cervera.

Se abrió Pedrosa, tras esta acción y aguantando encima de una moto descontrolada. El hueco creado lo aprovechó Rossi para cruzar en segunda posición la línea de meta, con Pedrosa tercero para completar el podio. Cuarto, a más de 4,5 segundos, llegó Lorenzo, que no pudo luchar en plenas condiciones más que en el primer tramo de gran premio, dando lugar a la llegada de los hermanos Espargaró, con Aleix sexto, con el objetivo cumplido, y Pol, séptimo.

Pero la gran guerra empezó mucho antes, en la vuelta 14. Márquez apuró demasiado la frenada a final de recta y estuvo a punto de picar con Rossi. Para evitarlo, se fue largo y por fuera, recto por la 'chicane', y dejó pasar a Pedrosa, con quien protagonizó otro 'pique' para volver a adelantarlo cuanto antes, sin que el de Castellar pudiera evitar el interior del de Cervera.

Las segundas motos, las preparadas para agua, calentaban motores en la línea de meta del Circuit de Barcelona-Catalunya, por donde Rossi seguía pasando líder vuelta tras vuelta, con Márquez a dos décimas a falta de ocho vueltas para el final, ya con Pedrosa a casi ocho décimas y Lorenzo, de nuevo retrasado, a 1,3 segundos de su compañero en Yamaha.

Pero poco le duró la alegría al siete veces campeón del mundo en la categoría reina, pues Márquez y Pedrosa querían ganar en casa. Una vez descartado el cambio de moto, pese a unos negros nubarrones en el cielo de Montmeló, las Honda pasaron al de Urbino para, a tres vueltas para el final, librar una batalla codo a codo por la victoria.

LA AMENAZA DE LLUVIA, UN CAOS

En la vuelta diecinueve, se dio un escenario peculiar que cambió la carrera. Tanto Márquez como Pedrosa adelantaron a Rossi, pero el de Cervera levantó la mano nada más ponerse líder y Pedrosa le siguió, mano arriba, para dejarse adelantar de nuevo ambos por el italiano, a quien habían pasado con bandera amarilla en pista, debido a la amenaza de lluvia. Se dieron cuenta de ello rápido los catalanes y reaccionaron a tiempo de evitar la sanción.

Rossi les pasó pero no pudo tirar con fuerza, lo que aprovechó Lorenzo para engancharse a ellos de nuevo. Con los cuatro juntos de nuevo, decidieron tirar adelante. Márquez se sacó una genialidad de la chistera y le robó de nuevo la cartera a Rossi a final de recta. En la próxima vuelta, Pedrosa también superó a Rossi en la entrada a la primera curva, mientras que Lorenzo, tal acordeón, volvió a descolgarse.