Miguel Ángel Nadal, primer expulsado de '¡MQB!'

TELECINCO.ES 14/04/2010 22:37

Miguel Ángel Nadal llegaba a '¡MQB!' advirtiendo que nunca había bailado. Estábamos más acostumbrados a verle correr en un campo de fútbol que en una pista, pero después de diez galas, el deportista ha logrado hacerse con el baile.

Ya fuera rock, urban dance o merengue, Miguel Ángel Nadal preparaba su sonrisa y se enfrentaba a la pista. Segundos después, una veloz Pilar Rubio le acercaba una toalla y aguantaba estoicamente las valoraciones del jurado. A lo largo de su paso por el programa, el ex futbolista aprendió a pisar la pista con delicadeza en el vals y con fuerza en el tango, aunque se le escapaba algún que otro pisotón. Con los portés, Nadal daba miedo a sus bailarinas, sin embargo, nunca dejó caer a ninguna de ellas. Y, gala a gala, consiguió lo que más difícil le parecía: Arrancarse la vergüenza, saltar y moverse a ritmos tan sensuales como un chachachá o un merengue.

Sólo tuvo un traspié en directo. En una de las galas, Miguel Ángel Nadal se perdió, se quedó en blanco, se colapsó y no recuperó el ritmo. El concursante lo admitió antes de que el jurado se pronunciara y se propuso mejorar semana a semana.

Pero, sin ninguna duda, el descubrimiento más importante que Nadal ha hecho en su paso por el concurso ha sido el referente a una parte de su cuerpo: La cadera. Creía imposible moverlas al ritmo de chachachá, samba o vals, pero también lo ha conseguido. Quizá fuera este movimiento de caderas lo que finalmente le catapultó al triunfo consiguiendo la victoria en la novena gala.

Para la décima gala, Miguel Ángel se preparó a fondo un urban dance, nunca lo había ejecutado en la pista pero no le dio miedo, tan sólo algún que otro problema en los ensayos cuando su bailarina le dio una patada donde más le puede doler. Sin embargo, Miguel Ángel se quedó en zona de peligro, no obtuvo los suficientes votos de la audiencia y tuvo que ejecutar un segundo baile, un chachachá.

Pero la audiencia no le salvó. Miguel Ángel Nadal se ha convertido en el primer expulsado de '¡MQB!' pero sólo tenía palabras de agradecimiento: "Ha sido una experiencia, tengo que agradecérselo a muchísima gente". Hubo palabras para Poty, jurado y compañeros, con los que le une una amistad que promete conservar y recordar.

El futbolista destaca lo mucho que ha aprendido, la disciplina a la que se ha sometido pero, sobre todo, ha conseguido "sentir la música, soltarme". Eso sí, le ha costado sangre sudor y lágrimas aunque las lágrimas ha preferido convertirlas en risas. "Cuando uno sufre, se da más cuenta de la diversión", decía el futbolista.

Con su expulsión, Nadal se lleva 10.000 euros para su proyecto benéfico. Se trata de la construcción del Palau en su tierra, en Manacor, "Es el edificio más emblemático, todo el mundo lo quiere terminar y yo quiero aportar mi granito de arena".