Exprimimos a fondo el Cooper S con 192 CV

Si hay un fabricante que derroche personalidad y carácter en cada uno de sus vehículos este es Mini. Y esta semana tuvimos la oportunidad de exprimir a fondo el Cooper S con 192 CV.

A simple vista, esta variante S presenta varias diferencias con respecto a sus hermanos de gama. Y para comenzar la parrilla cuenta con un diseño totalmente renovado y ahora se incluye el logo S en color rojo.

Además, se ha incorporado una doble entrada de aire en el parachoques inferior que mejora la refrigeración de los frenos.

Los cambios no sólo afectan a la imagen de este modelo, sino que también alcanzan al interior. Espacio que cuenta con un mayor equipamiento de serie, que incluye un volante y unos asientos de corte deportivo y un climatizador automático bizona. Unas diferencias que acentúan el carácter de este Mini Cooper S.

Pero sin duda, lo mejor de este coche se encuentra bajo su capó, donde nos encontramos con un motor de gasolina con cuatro cilindros que rinde 192 CV. Un propulsor que entrega toda su potencia desde muy bajas revoluciones y que nos ofreció una respuesta excelente.

La versión que elegimos para la prueba montaba un cambio manual de seis velocidades, que unido a la potente mecánica Twin Power Turbo, permiten a este pequeño compacto acelerar de 0 a 100 en 6.8 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 235 km/h.

Y por último y opcionalmente, la marca británica ofrece una transmisión automática también de 6 relaciones.

Además, esta versión es muy eficiente, y el gasto medio de combustible se mantuvo durante toda la prueba por debajo de los 7 litros.

Y es que el Mini Cooper S es un vehículo fabricado para hacer disfrutar y todo se ha diseñado con ese objetivo. Por ello, la dirección, la suspensión y el tacto del freno se han endurecido para ofrecer un rendimiento más deportivo.

Así es el Mini Cooper S, un automóvil rápido y con mucho estilo que ya está disponible desde 24.000 euros.