Basado en el R26 Fórmula Uno Team , esta variante es 123 kilos más ligera, una reducción muy, pero que muy notable a la hora de enlazar virajes y quemar neumáticos.
Porque el R-26R es un vehículo fabricado en el más puro estilo de competición; uno de esos coches que toma curvas y encara rectas con la mentalidad de batir récords de velocidad vuelta tras vuelta. Y no es de extrañar si echamos un vistazo a sus prestaciones. Este modelo de cuatro cilindros y dos litros de cilindrada alcanza 239 km/h de velocidad punta, acelerando de 0 a 100 en seis segundos; unos números que convierten a la versión más deportiva del Megane en un auténtico purasangre, y más si rueda en un trazado como el de Nürburgring.
Escenario de pruebas como la Fórmula 1, el DTM o las 24 horas, el circuito germano posee uno de los grandes premios más emblemáticos del mundo, una de esas citas marcadas en rojo en el calendario. Por algo los máximos responsables de la marca gala eligieron el Grüne Hölle para estrenar el modelo más potente de la gama Renault.
Dinámico, veloz y con una carrocería mucho más 'racing'; el nuevo Megane R-26R está llamado a sentar las bases de los turismo-deportivos del futuro.