Para empezar, debéis saber que esta reforma ha supuesto la eliminación de hasta siete infracciones que antes podían suponer la retirada inmediata del carné. Caso de aparcar en un túnel, dificultar un adelantamiento o de circular sin luces cuando la situación lo requiera. No se perderán puntos, pero si se mantendrán las sanciones económicas.
Otra de las novedades más llamativas es el incremento de nivel de velocidad a partir del cual se retiran los dos primeros puntos. Hasta ahora, este límite estaba fijado en 141 Km./hora pero la nueva ley ha elevado este registro hasta los 151 kilómetros por hora. Por encima de esta cifra la pérdida será de 4 a 6 puntos.
Eso si, el aspecto más controvertido es el que se refiere a los inhibidores de radar . De momento parece que los avisadores se mantienen dentro de la legalidad, no así los detectores y por supuesto los inhibidores cuyo uso será castigado con una multa de seis mil euros. De lo que no cabe duda es que la implantación de esta reforma agilizará ostensiblemente el pago de las sanciones.
Si por ejemplo el denunciado hace efectivo con prontitud el importe estipulado, se beneficiará de un descuento de 50%. Si por el contrario presenta un recurso, perderá todo el derecho a esta reducción