No parece que sea por superstición, pues no le ha dado suerte en los dos encuentros que ha disputado la selección lusa, pero lo cierto es que CR7 está dando más trabajo al peluquero de la selección que a los porteros rivales.
El jugador del Real Madrid ha lucido tres peinados distintos en sus tres partidos del Mundial. El primero, corto y bastante discreto, no le permitió ni marcar ni ganar ante Alemania. Contra Estados Unidos estrenó semi-rapado con una raya en forma de 'V' que al menos le llevó a dar una asistencia y lograr un empate.
Quizá haya pensado Cristiano que si sigue con esta evolución conseguirá por fin la primera victoria para su equipo en Brasil. Así, ante Ghana, el luso ha decidido llevar un poco más lejos su look rapándose la mitad de la cabeza y dejando la otra mitad repeinada hacia atrás, una línea divisoria bien marcada separando ambas partes.