Dani Alves se define como trabajador nato. "Me apasiona mi trabajo y lo vivo con mucha intensidad". Cinco años jugando con el Sevilla y un año en el Barça han demostrado que su pasión es el fútbol. Él lo ratifica.
El jugador carioca que apenas ha contado para su entrenador en este torneo y resultó decisivo en el partido de semifinales. En el primer balón que tuvo en sus botas, convirtió de manera magistral un libre directo desde la frontal del área. Está claro, que dentro del campo se ha convertido en un jugador decisivo para Brasil y fuera de los terrenos de juego, asegura que no podría vivir sin la feijoada. Eso sí, la cocina no es su lugar. "Mejor no tenerme en la cocina porque hago muchos destrozos"
Lejos de las estridencias y excesos de jugadores como Cristiano Ronaldo, Dani Alves se muestra comedido. Dice gastar poco en teléfono móvil aunque probablemente más de un español no estaría de acuerdo con él. "No suelo gastar mucho. 300 o 400 euros, aunque a veces cuando llamo mucho a Brasil sube un poco la factura. Soy más de mensaje que no cuesta tanto".
Acaba de ganar el triplete con el Barça y ya hace boca ante un posible triunfo en la Copa Confederaciones. Sin mirar a los éxitos tiene claro su futuro. Se ve jugando y se declara a este deporte. "Estoy loco por el fútbol". CGS