La ceremonia ha tenido lugar al mediodía. Después, los novios han soltado palomas al cielo como símbolo de su amor. Después ha tenido lugar un cóctel y se han realizado las fotografías. Los novios se han dirigido después hacia el lugar del banquete con todos sus invitados.
Con un diagnóstico de pocas semanas de vida, Jade quiere dejarles a sus hijos, Bobby, de cinco años, y Freddie, de cuatro, buenos recuerdos de los momentos que pasaron juntos. "Podrían olvidarme y no puedo soportar ese pensamiento", ha señalado apenada.
"Estaré viendo a mis hijos desde el cielo. Le he dicho a mi familia que seré la estrella más brillante", ha explicado Jade. De hecho, el deseo de dejarles a sus hijos un legado económico para que puedan estudiar ha llevado a Jade a vender tanto su boda como sus últimos días mediante exclusivas.
Sin embargo, ese dinero no se ha visto reducido ni un céntimo con la fastuosa boda ya que Jade ha conseguido organizarla gratis. El banquete, bebidas y comida, que asciende a 100.000 libras, ha sido pagado por el dueño del club Embassy, Mark Fuller, que también paga a los camareros que servirán el banquete.
The Sugababes, la banda que tocará en la fiesta y que habitualmente cobra 100.000 libras por actuación, no cobrará nada y el vestido de novia de 3.500 libras que ha lucido la novia ha sido donado por el dueño de Harrods, Mohamed Al Fayed.