El '10' vio su segunda amarilla en el 88' de partido cuando el marfileño Keita simuló una agresión de Kaká que nunca existió. El colegiado Stephane Lannoy no lo dudó y lo expulsó del terreno de juego.
La Federación brasileña se plantea ahora presentar un recurso para que Kaká pueda jugar contra Portugal en el último partido del Grupo G. Precisamente otro madridista como Cristiano Ronaldo está a una amarilla de la suspensión y si fuese amonestado contra Corea del Norte tampoco podría jugar el apasionante Brasil-Portugal del próximo viernes.
Kaká visiblemente molesto por la expulsión prefirió morderse la lengua en la zona mixta. "Qué por qué m e han expulsado? Buena pregunta. Prefiero no hablar demasiado. Ahí tiene la FIFA las imágenes para ver que la expulsión es injusta. No le hago absolutamente nada".
Kaká tampoco quiso culpar a Keita por simular una agresión, sin embargo no entiende cómo el árbitro le pudo mostrar amarilla por esa acción. "Yo estoy parado y chocamos, no es nada. Esto es fútbol y yo no he hecho nada violento, pero bueno tendré que aguantarme".
Al futbolista brasileño no le expulsaban desde que tenía 19 años y jugaba en el Santos. Kaká se mostró muy triste por no poder jugar contra la Portugal de su amigo Cristiano Ronaldo: "Me da mucha pena no jugar contra Portugal. Era un partido que me venía muy bien para seguir creciendo, pero bueno, me quedo con el partido que he hecho".
Dunga también cargó contra el árbitro al final del encuentro. "Queremos que haya espectáculo, pero los que tienen que controlar el partido no lo hacen. La roja de Kaká es increible", finalizó el seleccionador brasileño.