El español está gafado desde el Gran Premio de Malasia y no pudo ni marcar tiempos en su primera toma de contacto con el asfalto chino. Este era el propulsor que debía utilizar también en España y en Mónaco y ya sólo le quedan seis esta temporada.
En la segunda sesión mejoró ligeramente su rendimiento y marcó el décimo mejor tiempo. En la segunda sesión, Alonso salió con el motor con el que ganó en Bahrein. Seguramente sea ese el que utilice durante la carrera.
Fueron los Mclaren los que dieron muestras de ser, a priori, los favoritos para llevarse la victoria en China. El conducto F de los monoplazas plateados funciona, y si no que se lo pregunten a Button y a Hamilton, que consiguieron los mejores cronos del viernes gracias a él. La velocidad que permite alcanzar en la larga recta del circuito de Shangai hace posible que se metan entre los favoritos, junto con los Red Bull.
El que sigue en línea ascendente carrera tras carrera es Jaime Alguersuari. El barcelonés no tuvo los problemas en el coche que tuvo su compañero de escudería, Sebastian Buemi, ya que no llevaba la misma suspensión, y acabó octavo en los segundos libres, por delante de Alonso y de Pedro de la Rosa.
Por su parte, Buemi fue uno de los protagonistas de la jornada. En los primeros libres, las suspensiones delanteras de su Toro Rosso se partieron y perdió las dos ruedas delanteras, estrellándose contra los protectores.
Tiempos de la segunda sesión de entrenamientos libres:
JNP