Ya lo dijo Fernando Alonso: "Sepang es mi circuito favorito". En Kuala Lumpur, el español consiguió la primera 'pole' de su carrera deportiva y subió al podio en tres ocasiones, dos de ellas al primer cajón. Pero las circunstancias eran muy diferentes entonces, pues ni el R-25, ni el R-26, ni por supuesto el MP4/22, eran tan lentos como el R-28.
El monoplaza de Alonso llegará a Sepang más o menos en las mismas condiciones que en el Gran Premio de Australia, es decir, sin punta de velocidad y sin opciones de luchar por el podio. Sólo otro milagro del español haría posible un buen resultado. La única novedad, no sólo en el R-28, si no en todos los monoplazas, serán las aberturas en los chásis para facilitar la refrigeración ante las altas temperaturas.
Temperaturas que, de momento, no son tan altas. De hecho está lloviendo en Malasia y se prevé que lo haga durante el fin de semana, con lo que pueden variar los planes de las escuderías respecto a las carrocerías. Y pueden beneficiar a Alonso, que con agua es el mejor sin discusión alguna. La poca velocidad del Renault puede perjudicar mucho al español en Sepang, que cuenta con dos largas rectas en las que la rapidez es fundamental.
Quien tiene otra prueba de fuego en Malasia es Kimi Raikkonen. Después del fiasco en Australia, los F2008 han sido revisados a fondo en Maranello. Desde la escudería a la calma han llamado a la calma y el campeón ha asegurado que está encantado con el coche. Además, tendrán la ventaja de estrenar motor. Pero otro mal resultado encendería todas las alarmas.
Después de la exhibición en Albert Park, los favoritos sin discusión serán los McLaren. Fiable, seguro y sobre todo rápido, Lewis Hamilton está en el primer lugar de las quinielas para hacerse con la victoria en Sepang. El inglés ha comenzado bien la temporada y quiere afianzarse en el liderato de la general. Kovalainen, muy seguro en Australia a pesar del error que le costó el cuarto puesto en beneficio de Alonso, también tendrá opciones.