La Sábana Santa sale a la luz después de diez años

INFORMATIVOS TELECINCO / AGENCIAS 25/03/2010 17:34

"Sabemos que la Síndone es objeto de mucha curiosidad científica e histórica. En ella leemos todos los particulares de la Pasión de Jesús como son descritos en el Evangelio. Está claro que nuestra fe cristiana no la basamos sobre la Sábana Santa, sino en el Evangelio", afirmó Poletto, que reconoció que no existe "la certeza matemática" de que sea la auténtica tela en la que fue envuelto el cuerpo sin vida de Cristo.

Si es auténtica o no -agregó- lo dirán los científicos y los historiadores, "si lo logran". Poletto agregó que "todos los intentos para imitarla o recrearla han fallado y ella no puede ser una manufactura".

Muchas reservas

El cardenal de Turín informó de que hasta el momento 1.300.000 personas ya han reservado para visitar la Sábana Santa, que ha mejorado -precisó- su visibilidad tras la reparación a la que fue sometida en 2002, cuando le quitaron los parches que lo colocaron los monjas clarisas de Chambery (Francia).

La Sábana Santa se encuentra asimismo extendida, para evitar que los pliegues de antaño puedan dañar la imagen. Como ya hizo en 1998 el papa Juan Pablo II, Benedicto XVI viajará a Turín el 2 de mayo próximo para postrarse ante la Síndone y visitar la capital piamontesa.

El Papa Ratzinger oficiará una misa que se espera multitudinaria en la céntrica plaza de San Carlos y visitará el centro sanitario del Cottolengo de la localidad.

Benedicto XVI autorizó en 2009 la exposición a los fieles de la "Síndone" en 2010 como una ocasión "más que propicia para contemplar ese misterioso rostro, que silenciosamente habla al corazón de los hombres invitándoles a reconocerse en el rostro de Dios".

Diez años

La última vez que se expuso al público fue en el año 2000, con motivo del Año Santo. La Sindone (del griego "sindon", mortaja) está considerada una de las reliquias más famosas y discutidas de la Cristiandad.

Mide 4,39 metros de larga y 1,15 de ancha.

De ella se tienen noticias desde 1353, cuando una tela de lino que supuestamente sirvió de mortaja a Cristo aparece en Lirey (Francia), llevada, presumiblemente, por los cruzados que estuvieron en Tierra Santa.

Un siglo después llegó a manos de los duques de Saboya, que la custodiaron en Chambery. En 1532 resultó dañada por un incendio y en 1694 fue trasladada a la capilla del Duomo -la catedral- de Turín. Las pruebas para demostrar si de verdad envolvió el cuerpo de Cristo comenzaron en 1898, después de que un fotógrafo turinés hiciera una foto al lienzo y en el momento del revelado se dio cuenta de que las imágenes negativas representan el cuerpo y la cara de un hombre crucificado según contaban los Evangelios.

En 1989 fue sometida a la prueba del carbono 14 en tres laboratorios de Suiza, Estados Unidos y el Reino Unido, que establecieron que era un tejido de entre 1260 y 1390.

Críticas de expertos

Destacados expertos criticaron la prueba, al considerar que estaba mal hecha. Según el profesor ruso Ivanov, los tres trocitos de tela que se cortaron en aquella ocasión para analizar eran de las puntas; es decir, la parte por la que era sostenida la sábana por los prelados en las numerosas ocasiones en que fue presentada a los fieles a lo largo de los siglos desde la fachada de la catedral turinesa.

En abril de 1997 un incendió arrasó la capilla Guarini, donde se guarda el lienzo en la catedral piamontesa, pero la reliquia fue rescatada sin que sufriera daños. Meses más tardes fue colocada, extendida y no enrollada como hasta entonces, en una urna a prueba de incendios y atentados.

La Iglesia siempre ha considerado como irrelevante el hecho de la antig³edad, al señalar que la Sindone no es una prueba, "sino una invitación a rezar". IUL