Robaron en el establecimiento donde Margarita trabajaba y ella denunció el delito. A los dos presuntos autores los detuvieron a las pocas horas pero el entorno de los atracadores intenta que retiren la denuncia para que queden en libertad: "te amenazan de muerte, te escupen por la calle, te dicen mira que tranquila va la señora pero dentro de unos meses te matamos", son las perlas que aguanta Conchita por la calle, la dueña del establecimiento donde robaron, también protegida por la Guardia Civil pero que va a cara descubierta porque a ella ya la conocen. Fueron víctimas de un robo y ahora son víctimas del acoso y la presión.
La otra versión es la de los padres y las familias de los presuntos atracadores, en prisión preventiva desde hace un mes. "Nos están deshaciendo la vida. Nosotros somos los que tenemos a nuestro hijo de 18 años en la cárcel por un delito que no ha cometido. Somos los que estamos sufriendo el calvario de verdad" lo cuenta Argentina, madre de Adán, uno de los detenidos.
Aseguran que ni ellos ni nadie de su entorno han atemorizado a Conchita y a la joven dependienta para que retiren la denuncia: "al principio hice lo que haría cualquier madre. Fui a verla a su casa con mi cuñada, un payo amigo y la madre del otro chaval para pedirle que retirara la denuncia porque mi hijo era inocente, pero no hubo una palabra más alta que otra". Defienden la inocencia de sus hijos y niegan ser los autores de las presiones y amenazas.
Hoy ha vuelto a aparecer un cartel en el portal donde vive Margarita en el que le decían "Zorra estás muerta" y hoy ha vuelto a acudir la joven al centro de salud con una nueva crisis de ansiedad.
Son muchos los vecinos de esta localidad asturiana que han sufrido el acoso, como Tina, a la que llegaron a apalear en su tienda por no dejar entrar a unos niños de etnia gitana que la molestaban continuamente: "me harté y les dije que no entraban más porque eran maleducados. A los cinco minutos se me llenó la tienda de gitanos y empezaron a pegarme". Los autores, unos pocos individuos de etnia gitana, que presionan para seguir imponiendo su ley; las víctimas directas, los payos, las indirectas la comunidad gitana que sufre un nuevo estigma por culpa de unos pocos.
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