Las lluvias de Semana Santa mejoran la situación en Doñana: un 80% de las aves ha regresado, según los expertos

A pesar del calor, las últimas lluvias han mejorado mucho la situación de lagunas como la del Parque Nacional de Doñana. La diferencia es muy notable. Hace tan solo un mes estaba seca, al 10% de su capacidad, y ahora se encuentra a la mitad de su capacidad, al 50%, gracias sobre todo a las precipitaciones de Semana Santa. Informan Silvia Asiain, Ángeles Jiménez y Rocío Martínez.

Hace apenas un mes, la tierra en Doñana se resquebraja: "Todo estaba seco". Sin embargo, tras las lluvias de Semana Santa, quienes hacen el seguimiento de las aves, calculan que han regresado un 80%. "(Destacamos) la diversidad de aves que hace años no veíamos por la falta de lluvias", comenta Vicente Esteller, guía ornitológico.

En marzo se recogieron 145 litros por metro cuadrado y tal cantidad de agua permite que este ciclo hidrológico ya supere en precipitación a los tres anteriores: "Este último golpe de agua de precipitación en marzo realmente ha conseguido que se inunde la marisma", precisa Javier Bustamante desde la Estación Biológica de Doñana.

A la laguna de Fuente de Piedra también ha vuelto la vida: "Cada día van llegando más. Si sigue lloviendo aumentará la población", Mariola Sánches, ornitóloga en el espacio natural. Si el nivel de agua aumenta unos 10 centímetros, los flamencos tendrán un entorno ideal para la cría.

"Puede que tengamos posibilidades este año de que haya cría", detalla Marta Luque, guía turística. La cascada de Osera, que luce imponente, había perdido su belleza natural: "De ir a verla y ver unos hilos cayendo a ahora, que caen entre 12 y 15.000 litros por segundo...". Y con el espectáculo llega también el alivio para el campo.

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