Detectan por primera vez ballenas azules ante las costas de Nueva York

AGENCIA EFE 28/05/2009 23:28

"Es simplemente increíble oír uno de estos cánticos a tan solo decenas de millas de Broadway o del Canegie Hall. Es la primera vez que se documenta", aseguró el director del Programa de Investigación Bioacústica del Laboratorio de Ornitología de la universidad neoyorquina, Christopher Clark, en un vídeo colgado hoy en su página web.

Miembros de ese programa de investigación consiguieron grabar los sonidos de uno de esos gigantescos cetáceos a poco más de cien kilómetros de la costa de Long Island, así como los de otro algo más lejos de la isla neoyorquina.

Aunque estos animales, que pueden llegar a medir hasta treinta metros y pesar más de cien toneladas, pueden encontrarse en mares de todo el mundo, normalmente se mueven por aguas mucho más profundas y alejadas de la costa.

El registro de sus sonidos tuvo lugar el pasado enero, mientras una ballena azul se desplazaba de este a oeste ante las costas de Long Island.

Al mismo tiempo, se registraron sonidos similares procedentes de otro ejemplar que, en este caso, se desplazaba en el mismo sentido, pero mucho más lejos de la costa.

"Estas ballenas azules en peligro de extinción son los animales más grandes que jamás han vivido en este planeta y sus voces pueden viajar a lo largo de todo un océano", recordó Clark.

El descubrimiento "abre todo un nuevo universo de oportunidades para que todos nosotros aprendamos más sobre estas especies y apreciemos más la vitalidad de entorno marítimo de Nueva York", aseguró.

El responsable del departamento de Conservación Medioambiental de Nueva York, Pete Grannis, añadió en un comunicado de prensa que este descubrimiento supone un "importante hito en la historia medioambiental del estado".

"A mediados del siglo XX las ballenas azules fueron cazadas hasta el borde de la extinción. El que las encontremos migrando no muy lejos de las costas es verdaderamente notable", dijo.

En su opinión, este "espectacular" descubrimiento afectará a futuras decisiones que se tomen en materia de conservación de espacios marinos y de protección de estos animales ante posibles colisiones con embarcaciones o emisión de sonidos que puedan interferir en sus comunicaciones.