Según la encuesta, realizada entre diferentes poblaciones de todo el mundo, los latinoamericanos son los que más comparten fotos y vídeos por teléfono, los asiáticos son los que más juegan en el móvil y los africanos, los que más envían mensajes de texto, mientras que los norteamericanos pasan cerca de tres horas al día intercambiando distintos tipos de datos por teléfono.
Entre los encuestados, el 80 por ciento confiesa que duerme con el teléfono en la cama y el 40 por ciento que atiende el teléfono mientras está en el baño.
Con relación a los adolescentes, los números son aún más impresionantes y apuntan a que el 50 por ciento de ellos consigue enviar mensajes de texto con los ojos vendados y envía un promedio de 3.330 mensajes por mes.
En la encuesta, se preguntó qué preferirían dejarse antes que sus teléfonos. Entre las respuestas, el 63 por ciento respondió ‘chocolate’, el 55 por ciento ‘café’, el 22 por ciento cepillarse los dientes y el 21 por ciento respondió ‘zapatos’.
El estudio revela que el 20 por ciento de las personas prefiere perder la cartera antes que el teléfono y el 43 por ciento cree que su teléfono refleja su estilo personal. El 50 por ciento también asegura que su vida social sería insatisfactoria sin un smartphone.