Se encontrará a 375.000 kilómetros de nosotros. El mejor momento para verla será justo después del anochecer y antes del amanecer. Debido a un efecto óptico, cuando está en el horizonte parece más grande y brillante incluso que cuando está en el centro del cielo.
Aunque este año hemos tenido solo una, lo normal es que produzcan varias. El pasado, sin ir más lejos, tuvimos tres. Una de ellas fue, de hecho, la super-superluna: alcanzó u na luminosidad y tamaño más grande que lo habitual en estos casos, un fenómeno que no se producirá hasta 2034.
¿Acompañará el tiempo?
Para ver la luna llena solo basta mirar al cielo en una noche sin nubes. En el caso de esta, que se producirá la madrugada del domingo al lunes, se esperan que los cielos despejados, excepto en el tercio noroeste, donde habrá nubes pero sin apenas probabilidad de que llueva (más detalles, aquí).
La buena noticia es que, si te quedas sin verla, no tendrás que esperar mucho para la siguiente: las próximas superlunas se producirán el 2 y 31 de enero de 2018.