Vela señala que España tiene "los ojos abiertos" a la innovación pero lo tiene "difícil" por el tamaño de sus empresas

EUROPA PRESS 18/06/2015 15:09

Vela ha indicado que las consideradas pymes, que suponen un 97 por ciento del tejido empresarial español, tienen un amplio espectro cuyo máximo son 250 trabajadores y, mientras en Alemania la mayoría de empresas de esta categoría rondan esta cifra, en España el número más habitual es el de 10 empleados.

"Es difícil que las pequeñas empresas hagan innovación porque es un riesgo, hay que tener, no sólo la idea, sino también el músculo económico", ha lamentado la secretaria de Estado.

Es por esta razón por la que "todavía no" se han alcanzado algunos niveles europeos en I+D+i, según ha señalado, aunque apunta que el sector está "en ánimo de hacerlo". Las cifras aún están por debajo de Europa, en donde, del total de inversión en I+D+i, dos tercios llegan desde las empresas. En España este porcentaje es el 53 por ciento.

En este sentido, Vela indica que en países que actualmente destacan por su gran desarrollo e industria, como Corea o Japón, las cifras rondan el 80 por ciento.

Aún así, la responsable de I+D+i del Gobierno se ha mostrado "encantada" con los datos que, según recoge el 'Ketchum Innovation Kernel 2015', señalan que 6 de cada 10 consumidores españoles estaría dispuesto a pagar un 23 por ciento más por un producto innovador. "Lo voy a incluir en mi discurso", ha bromeado.

Según apunta esta encuesta, se trata del porcentaje más bajo entre los países en los que se ha llevado a cabo la investigación --además de España, también en Estados Unidos, Reino Unido, China y Hong King--. Sin embargo, es una cifra "muy significativa", según ha indicado la responsable de comunicación de Ketchum Digital, Ludi García.

ESCOGER MARCA POR SU INNOVACIÓN

El trabajo, realizado entre los meses de enero y febrero de este año, se recoge que el 95 por ciento de los encuestados creen que la innovación es importante para escoger marca. Para García, esta respuesta de los ciudadanos "muestra que la innovación no ha sido reducida a una palabra de moda" y ha apuntado que "todavía tiene el poder de influir sobre la reputación corporativa y de marca e, incluso demandar un precio más alto al pasar por caja".

Del mismo modo, el informe revela cómo para los españoles innovar no significa lanzar cada año una novedad, sino hacerlo en el momento en el que la marca cuente con un producto o servicio que realmente mejore o tenga impacto directo en su calidad de vida. En este punto, la forma de comunicar innovación cobra un papel fundamental.

García lo ha resumido en cinco puntos: "tener claro que en innovación la credibilidad pasa por ganarse y no por comprarse, pensar en grande, el tiempo como factor para desarrollar avances importantes, tecnología frente al diseño y trabajar siempre más allá del target".

En el caso de España, el estudio determina como significativo el uso de las redes sociales, únicamente, como fuente de información y consulta para los públicos jóvenes, mientras que los mayores de 35 años apuestan por soportes 'offline'.

MÁS IMPORTANCIA A LA INNOVACIÓN EN SALUD

Por otra parte, mientras algunos presuponen que la innovación en electrónica de consumo captan la mayor parte de atención al cliente, el informe señala la industria de la salud como el sector de negocio más valorado por su innovación entre consumidores, tanto a nivel internacional como en España.

Concretamente, en España la innovación en este sector es "muy importante" en salud para el 74 por ciento de los encuestados, seguido de los ordenadores (53%) y electrónica de consumo (45%).