Edgar Allan Poe comenzó su carrera literaria con sólo 18 años, con la publicación de "Tamerlane y otros poemas". En los 22 años siguientes, destacó como poeta, crítico, periodista romántico y fue uno de los primeros escritores en Estados Unidos, pero sobre todo maestro mundial del relato corto.
El 7 de octubre de 1849, Poe murió en Baltimore, ciudad en la que, con motivo del aniversario de su nacimiento, comienza casi un año de conmemoraciones que incluyen visitas guiadas a la última residencia del escritor en el 203 de la Calle Amity, que ahora alberga un museo abierto en temporada.
Los homenajes culminarán el 10 de octubre, con una representación de su funeral, coincidiendo con el 160 aniversario de la muerte del escritor.
Una vida dedicada al terror y al misterio
Casi de acuerdo con la obra característica de Poe, que incluye cuentos de terror, relatos detectivescos, situaciones macabras y misterio, mucho misterio, la causa de la muerte del narrador nunca se aclaró. Las especulaciones incluyen alcoholismo, congestión cerebral, abuso de drogas, cólera, fallo cardiaco, suicidio, tuberculosis y hasta hidrofobia.
La influencia de Poe, cuyas exploraciones intelectuales incluyeron asuntos como la criptografía y la cosmología, alcanzó a escritores como Jorge Luis Borges, Julio Cortázar y H.P. Lovecraft, y el poeta nicaragüense Rubén Darío le dedicó un ensayo en su libro "Los raros". Sus relatos se han multiplicado en adaptaciones cinematográficas, en revistas de dibujos, y en la televisión con algunos episodios de la serie española "Historias para no dormir", dirigida por Narciso Ibáñez Serrador.
Esta semana, por 4 dólares, los visitantes de la casa de ladrillo y persianas verdes donde Poe vivió un par de años podrán ver el sitio en el que el escritor se enamoró de su prima, Virginia Clemn, que tenía 13 años el día de la boda. El museo también programa exhibiciones acerca de su vida, expone ilustraciones de Gustave Doré para "The Raven", y muestra el escritorio portátil que Poe usó durante sus viajes.
Visitante misterioso
Tras la visita a la casa de Poe, su admiradores pueden irse hasta la Taberna Annabele Lee, así bautizada en recuerdo del último poema del autor. En el interior, entre paredes cubiertas con poemas de Poe, se puede beber cerveza "Raven".
Una vida dedicada al terror, una muerte con una causa desconocida y admiradores misteriosos. Cada año, durante la conmemoración del aniversario de su nacimiento, alguien deja en su tumba del escritor una botella medio vacía de coñac y un ramo de rosas rojas. El misterioso visitante a quien llaman 'Poe Toaster', lleva cumpliendo este ritual desde 1949. BQM