Finanzas y café se unen en una sala presidida por veinticinco dibujos de Castelao

EFE 08/02/2009 13:36

A su valor incalculable por ser la obra de uno de los artistas más importantes y emblemáticos de la historia de Galicia, se suma, asegura Carmelo Beltrán, director territorial del BBVA, el apego sentimental a unas láminas ilustradas a plumilla por Castelao, que llegaron a manos de un banco, con un patrimonio artístico de más de 3.000 obras, en el año 1969.

Las dificultades económicas obligaron a las dos hermanas de polifacético intelectual gallego, Teresa y Josefina, a poner a la venta en el año 1969 parte de los dibujos de su hermano, fallecido el 7 de enero de 1950 en Buenos Aires.

Lo hicieron a través de una persona de confianza que regentaba un supermercado en Betanzos, quien tras un primer intento fallido ofreció las obras a José Luis García Dans, director de Agrupación de Lugo del Banco de Bilbao (BB).

García Dans, recuerda, se desplazó a Betanzos acompañado por el director del periódico lucense El Progreso, en aquella época José Trapero Pardo, con el fin de tener una opinión y consejo de "alguien más experto".

Una vez vistos aquellos dibujos y después de consultar con la Central del Banco de Bilbao, José Luis García Dans adquirió en el supermercado los 25 dibujos por 550.000 pesetas, obras hoy de valor incalculable que en ese momento le fueron entregadas en una de las antiguas cajas metálicas de dulce de membrillo.

De vuelta, en Lugo, a García Dans ya le ofrecían una cantidad de dinero sensiblemente superior, pero el banco, que más tarde pasaría a formar parte del grupo BBVA, decidió quedarse con ellas e incorporarlas a su patrimonio artístico.

A partir de ahí, las láminas, de la década de los 20, que estaban un poco perjudicadas porque el tratamiento en papel no había sido el adecuado, se limpiaron y enmarcaron.

Pero, en la mente de García Dans estaba mostrar más allá de las paredes de la oficina de Lugo ese legado importante y es entonces cuando viaja a Madrid y se lleva a Lugo a buen conocedor la obra de Castelao, Eduardo Blanco Amor.

Con ese apoyo, y pese a las dificultades políticas del momento para exponer la obra del padre del nacionalismo gallego, Dans que se califica como amante del arte, organizó una exposición que se hizo itinerante por distintas oficinas e instituciones que la solicitaron.

Posteriormente, pasaron a ocupar las paredes de la segunda planta de la sucursal que esta entidad financiera tiene en la calle Reina de Lugo, de donde fueron retiradas en 1984 y guardadas en el archivo a causa de una reforma.

La imposibilidad de volver a colgarlas todas juntas en una misma sala hizo que los directivos tomasen, en 1986, la decisión de trasladar esas láminas al primer piso de la sede de la Territorial en el Cantón Pequeño de A Coruña, donde de nuevo se limpiaron y se sustituyeron los marcos.

El año 2008, las obras volvieron a motivar un cambio de ubicación, pero en esta ocasión sólo fue necesario ascender unos peldaños y colocar las ilustraciones en esa sala de café caracterizada por una luz muy tenue adecuada al papel, situada al lado del lugar donde se cierran parte de las inversiones de algunas de las principales fortunas gallegas.

En un futuro, "no podría precisar exactamente cuando, todavía hay mucha información y documentación que recabar, haremos una exposición de lo que fue el Banco de La Coruña, ahora la sede del BBVA, y probablemente se ponga de nuevo ante el público este tesoro de Castelao", concluye Beltrán.