Según ha informado la organización en un comunicado, se trata de una gran exposición que ya ha recorrido varias ciudades europeas, llegando a Barcelona precedida por un gran éxito.
Pudo ser visitada también en Madrid en 2014, donde tuvo que prorrogar su estancia gracias a la gran afluencia de público, que superó los 100.000 visitantes, mientras que en el Palacio Euskalduna de Bilbao batió todos los récords del recinto en 2015 siendo la exposición más visitada en la historia del Palacio.
Según el escritor y comisario de la exposición, Javier Sierra, se trata de "un viaje al corazón de uno de los hallazgos arqueológicos más enigmáticos de la historia".
La muestra presenta más de 150 piezas, reproducciones con origen en los hallazgos del mausoleo de Qin Shi Huang; cobra especial relevancia la reproducción de la sección del foso 1 de la gran excavación de Xi'an a escala 1:1, con más de 80 guerreros acompaña la muestra con elementos interactivos, de modo que se incita al visitante a realizar un viaje a través del tiempo.
Alrededor de la excavación, un diorama a todo color del foso original permite imaginar el enorme tamaño de la excavación.
Además, se pueden admirar fuera del foso ocho reconstrucciones de figuras humanas, más grandes que el tamaño real de los hombres de la época, representando a hombres de distintos estamentos: gobernadores, oficiales y guerreros de diversos rangos y especialidades, junto a caballos, armas, joyería, herramientas de uso cotidiano y arte.
Paneles explicativos permiten conocer más sobre la llamada 'octava maravilla del mundo': ya que los Guerreros de Xi'an fueron declarados Patrimonio de la Humanidad en 1987, y en 2010 los responsables de la excavación recibieron el Premio Príncipe de Asturias por su labor.
Están a disposición del público audioguías cuyo contenido acompaña al recorrido de la exposición; la versión en castellano ha sido grabada por Javier Sierra.
Completa esta exposición un documental cinematográfico con la intrigante historia del descubrimiento del Ejército de Terracota por unos granjeros chinos en marzo de 1974.