Carlos Fuentes recibe la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica

AGENCIA EFE 24/03/2009 18:56

La entrega tuvo lugar en el Palacio de la Moncloa, en un breve acto en el que el escritor mexicano estuvo acompañado por su esposa, la periodista Silvia Lemus, y al que sólo se permitió la entrada de prensa gráfica.

También asistieron a la entrega de la gran cruz el jefe de la Diplomacia Europea, Javier Solana; el consejero delegado y el presidente de Prisa, Juan Luis Cebrián e Ignacio Polanco, respectivamente, el escritor y periodista Juan Cruz y el crítico peruano Andrés Ortega, entre otros.

La importancia del autor de novelas como "La región más transparente", "La muerte de Artemio Cruz", "Cambio de piel" o "Terra nostra", quedó patente en los recientes homenajes que se le tributaron en México, en noviembre de 2008, con motivo del 80 cumpleaños del escritor.

Los homenajes se prolongaron a lo largo de un mes y en ellos participaron los Premios Nobel Gabriel García Márquez y Nadine Gordimer, y otros escritores como Juan Goytisolo, Nélida Piñón, Tomás Eloy Martínez, Sealtiel Alatriste, Gonzalo Celorio y Sergio Ramírez, por citar a algunos.

Carlos Fuentes no concibe la literatura como ilustración de verdades sabidas sino como "una búsqueda de verdades ignoradas", según ha dicho el propio escritor en alguna ocasión, y esa búsqueda ha quedado plasmada en una amplia obra literaria, situada entre las más brillantes de las letras hispanas.

Premios como el Internacional Alfonso Reyes (1979), el Nacional de Literatura de México (1984), el Cervantes (1987), el Príncipe de Asturias de las Letras (1994), el de la Latinidad de las Academias de las Letras de Francia y Brasil (1998), el de la Real Academia Española (2004) o el Internacional Don Quijote de la Mancha (2008) han reconocido su trayectoria literaria e intelectual.

Dotado para unir en su obra lo arcaico, lo clásico y lo moderno y para habitar "con naturalidad el epicentro de las civilizaciones", en palabras de Nélida Piñón, Fuentes es un claro ejemplo de ciudadano del mundo que, sin embargo, siempre conservó la pasión por su país, al que ha dedicado novelas como "La región más transparente" o "La voluntad y la fortuna", su último trabajo.

Es autor también de las novelas "Aura", "Zona sagrada", "Gringo viejo", "La silla del águila" o "El instinto de Inez", y ha cultivado además el ensayo, las memorias, el cuento y el teatro.