Es por ello, que la duquesa ha decidido alejarse de sus problemas y se ha marchado a pasar unos días a Ibiza, en donde la hemos podido ver junto a sus nietos Luis y Amina.
La Duquesa de Alba estaba espléndida con un bikini azul y no paró de dedicarle mimos y atenciones a sus nietos, quienes estuvieron muy pendiente de su abuela mientras jugaban en las cálidas aguas mediterráneas.
Los problemas de la duqesa comenzaron cuando Francisco Rivera, el ex marido de su hija Eugenia, expuso su intención de pedir la custodia de la hija que ambos tienen en común para llevársela a Sevilla, el lugar donde el torero quiere fijar su nueva residencia.
Ante tal decisión Eugenia se opuso por completo y ha decidido poner trabas al proceso de nulidad matrimonial que quería conseguir Francisco para poder casarse con su nueva novia.
La Duquesa de Alba siempre había mostrado una grandísima simpatía por su ex yerno pero ante tales cambios parece que la relación entre ambos se ha enfriado y ahora la duquesa se ha centrado en apoyar incondicionalmente a su hija Eugenia.
A estos conflictos se ha sumado hace unos días el fallecimiento de Belén Ordoñez, una gran amiga para la duquesa, quien se mostró muy afectada con su pérdida.