Una exposición revive en Barcelona la pintura renovadora de los años ochenta

AGENCIA EFE 18/06/2009 18:04

La directora de la Colección de Arte Contemporáneo Fundación La Caixa, Nimfa Bisbe, ha explicado hoy en rueda de prensa que todos los grandes lienzos expuestos forman parte del fondo de la institución y en el año 2009 sirven para "recordar aquellos momentos en los que la pintura volvía a introducir la figuración, después de años de abstracción y arte conceptual".

La selección, bajo el título de "Figuraciones", incluye desde una pieza de la etapa inicial del mallorquín Miquel Barceló a una pintura de Julián Schnabel, actualmente más conocido por su faceta de cineasta con películas como "Antes que anochezca" y "La escafandra y la mariposa".

Además, la exposición da a entender que se trata de obras de un período "emblemático", especialmente en España, en plena transición política, mientras Madrid era la capital europea de la movida, y que sirvió a La Caixa para poner los cimientos de su colección.

La primera de las obras expuestas es "El orden de los ángeles", realizada entre 1984 y 1986, por el alemán Anselm Kiefer. Una obra de colores oscuros que es una metáfora de Alemania después del nazismo.

El italiano Enzo Cucchi tiene su espacio con un "Sin título (Rue Rimbaud)", de 1985, en el que rememora el viaje del poeta francés Arthur Rimbaud por Abisinia, mientras que el lienzo de Julian Schnabel, "El Quijote se encuentra a Corleone", es una muestra de la intensidad emotiva y expresiva del pintor norteamericano.

Por primera vez, se expone en Barcelona "Cabeza, negro y plata", del santanderino Juan Navarro Baldeweg, en la que la cabeza que ocupa toda la tela está basada en la escultura arcaica de los "kouros" griegos.

Georg Baselitz está representado por "Madre negra con niño negro", de 1985, caracterizada por estar estructurada a partir de densas masas de color y figuras estáticas, y A.R. Penck, pseudónimo de Ralf Winkler, ocupa totalmente una de las paredes de una de las salas con "Tríptico para Basquiat", un homenaje a uno de los más destacados representantes del grafito, Jean-Michel Basquiat.

El Barceló de esta exposición es "Mapa de carne", de 1982, un cuadro en el que se nota la influencia de Picasso y que representa un gran retablo de figuras híbridas, entre humanas y animales, que se abren para mostrar su anatomía interna.

Miguel Ángel Campano está presente con "La Grappa XXXVIII", de 1986, con un gigantesco racimo de uvas en uno de los puntos centrales de la tela, mientras que el catalán Xavier Grau muestra "La primera palabra IV", de 1987, que no se exponía desde principios de los años noventa.

Completan la exposición las obras "Tulipa 00", del madrileño José María Sicilia; "Músicas lejanas o doble voz", del mallorquín Ferran García Sevilla, y "Celebración en el lago I", del zaragozano José Manuel Broto.

Nimfa Bisbe ha rememorado que todos los autores representados en esta exposición, "pequeña pero contundente", continúan en activo, aunque "la mayoría han recibido muchas críticas".

Sin embargo, para Bisbe, "la pintura expuesta continúa siendo válida".

Por otra parte, ha avanzado que en el mes de noviembre, el pintor Luis Gordillo será el comisario de una gran exposición en el CaixaForum barcelonés con más de un centenar de obras, de todos los estilos y géneros, de los últimos treinta años, del fondo de La Caixa.