El programa, que comenzó como una serie de especiales dedicados a un artista del pasado donde la primera emisión estuvo dedicada al torero Paquirri, acabó convirtiéndose en un clásico de los fines de semana, debido en gran parte a la profesionalidad y empatía de Mª Teresa hacia su público. Cinco años de compañía ininterrumpida, calando a la gente y con un equipo acreditado en un mundo muy olvidado por la televisión.
Mª Teresa, que esta viviendo ahora un momento muy dulce al lado de su actual pareja Bigote Arrocet, afirma que "cuando entro por las puertas de este plató siento que el tiempo no ha pasado y que mi vida es la misma de entonces". A la periodista no le gusta recordar los momentos tristes vividos en el programa "como el día de Manolo, Tony Ronald o Alberto Cortez cantando a la memoria de Paco de Lucía", pero también ha habido momentos divertidos para recordar "como saber que la gente me quería ver caer de los tacones o lo mucho que hemos bailado" dice entre risas.
Pero no sólo es un programa de recuerdos, sino que también traen a nuevos artistas. Maria Teresa está contenta con el programa y no quiere abandonar la televisión. Como ella dice "la carrera de alguien en televisión se acaba cuando la gente no lo quiere ver"