Tan tortuosa ha sido la ruptura y la menara de hacerlo para ella que el sábado, cuando estaba interpretando su último single Wrecking Ball se puso a llorar. Y no es casualidad, ya que esa canción también habla de un ex que se ha portado muy mal destrozando a la enamorada.
Pocas horas después repetía actuación en otro sitio pero con un vestido de rejilla que descubrñía todo su cuerpo con una minúsculas braguitas y un cubrepezones,... y nada más; ¿cómo si nada hubiese pasado?
Pues bien, amigas cercanas a la cantante han contado a Hollywood Life que por fin Miley se está dando cuenta de que Liam le ha sido infiel, y no para de repetir que está mejor sin él y que no le importa nada; aunque en realidad está devastada.
"Ella reía ciegamente que todo saldría bien con Liam, que pasase lo que pasase funcionaría porque ella creía que era su alma gemela. Sin embargo él no luchó nada por la relación y se fue de esa forma tan horrible" dice una fuente cercana a la cantante según Hollywood Life.
"Ahora toda esa tristeza se ha transformado en ira, le ha hecho la vida muy dura durante mucho tiempo y todos pensamos que mejor que lo hayan dejado" continúa explicando esa fuente.