Y es que en dicha fotografía -tomada en la estación de esquí suiza, Gstaad- que colgó Madonna, aparece su hijo Rocco de 13 años de edad junto a un par de amigos, todos ellos con botellas de alcohol. No sería nada grave si dichos chicos no fuesen menores de edad, ya que muchos lo han entendido como una motivación al consumo de alcohol entre menores.
La Ciccone solo quería disfrutar de una fiesta para dar la bienvenida al nuevo año como bien puso en el post de Instagram: "¡La fiesta acaba de comenzar! ¡Vamos 2014!", un mensaje bastante alegre pero que ha quedado obnubilado por el mal uso de la elección de la foto. Al rato y al ver la cantidad ingente de comentarios negativos, Madonna pidió disculpas a través de otra foto, donde aparecen los dos amigos de su hijo, disfrutando -esta vez sin botellas de por medio- de la celebración.
En esta ocasión el mensaje ponía lo siguiente: "Nadie bebió ¡Solo estábamos divirtiéndonos! Calmaos y tened un poco de sentido del humor. No empecéis el año juzgando". El caso es que la pose de su hijo con botellas de vodka y ginebra le ha costado varias críticas a la 'ambición rubia'.
La cantante nunca ha estado exenta de polémicas, sobre todo por cada actuación que ha hecho y por la cantidad ingente de videoclips que ha rodado, que no han dejado indiferente a nadie. Sin embargo, en lo que se refiere a la educación de sus hijos, es donde más críticas pueda recibir y de las cuales no sepa lidiar con ellas. Finalmente solo ha quedado en una anécdota que contar.