La noticia del tonteo saltó la madrugada del 11 de enero, en plena celebración VIP de los Globos de Oro. Aunque los protagonistas del romance estaban en mesas separadas, cuando el intérprete de 39 años finalizó fue directo al encuentro con la estrella musical con la que se vio cantando y bailando un tema de Justin Timberlake. Las miradas cómplices y las sonrisas delataron algo más que un simple amistad. Hubo medios que apuntaron a un encuentro privado de las dos estrellas tras abandonar la celebración.
Dos días después volvían a coincidir en el desfile de otoño de Stella McCartney en Los Ángeles. Llegaron por separado, pero testigos del evento aseguran que se abrazaron y pasaron unos minutos charlando. Una semana más tarde, la estrella cinematográfica y la intérprete de Hot & Cold compartían un momento con el reparto de la obra The Absolute Brighness de Leonard Pelkey, hasta posaron para un selfie que colgaba minutos más tarde el actor James Lecesne en su cuenta de Twitter.
Sin embargo, en los últimos días los encuentros entre ambos habrían tomado un cariz más privado. El pasado jueves 4 de febrero, Orlando y Katy acudieron juntos a la fiesta de cumpleaños del manager del actor, celebrado en Argyle y al que acudieron otros rostros conocidos, como Jennifer Aniston y Jason Bateman. Dos días más tarde, y coincidiendo con el fin de semana, la parejita de tortolitos fue vista en la fiesta de cumpleaños del hijo de Robert Downey Jr., a la que también fue invitado su hijo, Flynn, fruto de su relación con la modelo Miranda Kerr. "Ella (Katy) parecía muy cómoda con Flynn y ambos estaban sonrientes y felices. Katy no conocía a tanta gente como Orlando, por lo que ella estaba más tímida y callada", decía un testigo a E! News.
Este romance en ciernes continuará*