"Para mí sería una gran ilusión. ¿Dónde estarían esas obras mejor que en mi tierra, que es Barcelona?", ha añadido en rueda de prensa, remarcando que su colección privada de entre 600 y 700 obras abarca desde el siglo XIII hasta hoy, con cuadros de impresionistas, postimpresionistas, rusos, alemanes y catalanes, entre otros, aunque el criterio para seleccionar las obras que irán a Barcelona depende de los expertos.
Ha remarcado que la relación con el MNAC es "buenísima" y ha confiado en que la llegada de la colección a Barcelona sirva para potenciar el museo de Montjuïc, de la misma manera que el museo Thyssen de Madrid contribuyó a forjar un 'Paseo del Arte' que ha hecho de Madrid una capital mundial en este ámbito.
La directora general adjunta de la Fundación de La Caixa, Elisa Durán, ha remarcado que la suma de complicidades e ilusiones "permitirá soñar" con la posibilidad de tener un museo Thyssen en Barcelona, aunque no ha concretado el papel de la fundación en las negociaciones.
Ambas han hecho estas declaraciones tras presentar en el CaixaForum de Girona la exposición 'Rusiñol, Monet, Gauguin, Sunyer. El paisaje en la colección Carmen Thyssen', que recorre la historia del paisaje en la pintura catalana y europea a través de una cincuentena de obras, algunas de las cuales podrían verse en el MNAC muy pronto de forma definitiva.