Leo Hargreaves podría ser el bebé que más sonrie del mundo. Ya antes de nacer, a su madre le realizaron una ecografía a las 31 semanas de embarazo, y el pequeño salía sonriendo, algo que sorprendió hasta a los propios sanitarios del hospital.Amy Cregg, la madre de 24 años, asegura que incluso después de haber nacido Leo no para de sonreir.
"Mi pareja Leighton y yo estábamos absolutamente sorprendidos. Pero esa ecografía fue sólo el principio, porque después de nacer no ha parado de sonreir, incluso cuando está durmiendo", aseguró Amy al Daily Mail. Los padres del pequeño de Acrington, Reino Unido, aseguran que varias empresas de modelaje están tratando de contratar al pequeño por su sonrisa, aunque eso no les interesa hasta que Leo sea mayor.
Los médicos del hospital que realizaron la ecografía aseguran que la pantalla del escaner estaba inundada por la sonrisa de Leo. "Creo que podemos decir con toda seguridad que es el bebé que más sonríe que hayamos podido ver", asegura un portavoz del centro.