"Ya estoy de vuelta y me toca empezar de nuevo otra vez. Definitivamente ha sido duro, pero voy a estar bien y sé que esto me va a ayudar en el largo plazo. Nadie creía en mí al principio, sólo mis amigos y yo, pero era todo lo que necesitaba. Sólo yo, mis amigos, mi ciudad y mis fans. Quiero ser grande y voy a serlo, no hay duda al respecto", reiteró con rotundidad Derrick Rose.
Y es que el base de los Bulls realiza estas declaraciones en el primer capítulo del documental, que presenta Adidas bajo el título de 'Belief', sobre su recuperación y regreso a las canchas, donde Rose relata en primera persona sus sensaciones, su primeros días de rehabilitación, el apoyo que recibió de su familia y de sus aficionados.
Entre sus reflexiones, el base estadounidense, que se perdió por esta grave lesión de ligamentos los Juegos Olímpicos de Londres, desvela cómo vivió el conocer el alcance de su lesión.
"Cuando me rompí el ligamento cruzado anterior no pensé que fuera nada importante, así que todo el tiempo que estuve en la máquina de la resonancia magnética estaba rezando y llorando, con la esperanza de que no estuviera roto. No es suficiente para describir lo que sentí en ese momento", confesó, tras conocer que el ligamento estaba roto y que tenía que pasar por quirófano.