"Una vez se tenga la licencia de ejecución, estimo el nuevo Palau en unos dos años. El presupuesto, por inversiones parecidas, ha sido de 130-150 millones de euros, pero incluía terrenos y aquí nosotros no tenemos que hacer esta inversión. Serían unos 100 millones de euros para hacer un pabellón con potencia", manifestó en rueda de prensa el directivo encargado del área económica, estratégica y patrimonial del club, Jordi Moix.
Antes de emprender la concesión y ejecución de las obras, hay unos plazos que el club tiene bien marcados. Primero, deberá reducir la deuda del club hasta dejarla en unos 150 millones de euros, siendo ahora de 335 millones. Entonces, podría disponer de nuevo de la capacidad de encontrar fondos, por lo que el siguiente paso será encontrar la financiación, con la posibilidad patente de comercializar el nombre del nuevo Palau Blaugrana.
No obstante, todo queda supeditado, además de a reducir la deuda, al referéndum en el que, como se explicó en la Asamblea General del pasado sábado, los socios decidirán si se construye un nuevo Camp Nou (con una inversión prevista de 600 millones de euros) o se renueva el actual. En el primer caso, el nuevo Palau Blaugrana se ubicaría en la nueva zona del feudo blaugrana, mientras que en el segundo se construiría en las actuales instalaciones del Miniestadi, que se derrocaría.
De momento, el club está a punto de cerrar el estudio de viabilidad económica, deportiva y de uso para el nuevo Palau, paso que se puede hacer ya sin necesidad de obtener permisos ni de conocer su futura ubicación. Así, junto a tres empresas con experiencia en el sector, el club espera disponer de una información necesaria para acelerar y concretar los siguientes pasos a seguir.
"Tenemos decidido con quién hacer el estudio de mercado, con un consorcio de ISG, AEG e ICON. El contrato está negociado en cuanto a cantidades, estamos perfilando las cláusulas y en las próximas semanas esperamos firmar este estudio. ISG ha participado en Wembley, y gestiona la explotación comercial de una parte de VIP y palcos, también el 'ticketing' del O2 de Londres. Tienen experiencia directa en definir potenciales ingresos", señaló Moix.
En cuanto a AEG, de origen californiano, son propietarios y gestores del Staples Centre de Los Angeles. "Ganaron en Europa el concurso del O2 de Londres, así como del pabellón de Paris-Bercy, el pabellón de Berlín, que es el que se parecería más a lo deseado para el nuevo Palau Blaugrana. "AEG podría ser, además de hacer el estudio, partícipe de lo que hagamos", auguró.
"Me gustaría concretar una fecha, pero hay una parte de la ecuación que no depende solo de nosotros. Cuando tengamos hecho el referéndum, en un año o dos se planteará, veremos. Pero depende de terceras partes, y prefiero no avanzar más concreto. Habrá que buscar financiación en el mercado económico, y ahora estamos en crisis. Para poder ejecutarlo, primero debes pasar un proceso administrativo. Pero pienso que serán plazos más cortos que largos", apostilló Moix.