De esta manera, el piloto inglés comparte el liderato del campeonato junto a Vettel (43), que se impuso en la prueba inaugural en Australia. Por su parte, el holandés Max Verstappen, que partía desde la parte trasera de la parrilla tras sufrir problemas en la calificación, protagonizó una remontada espectacular para concluir tercero por delante de su compañero de equipo, el australiano Daniel Ricciardo.
Otra de las grandes sorpresas fue Sainz, el primero de los 'mortales'. El madrileño consiguió ser el mejor tras los Mercedes, los Ferrari y los Red Bull y concluyó séptimo, dando una lección de estrategia al partir con neumáticos superblandos, al contrario que el resto de coches -con intermedios-, una elección que le lastró en un principio pero que le dio rédito con el paso de las vueltas.
Todo lo contrario para Alonso, que por segunda carrera consecutiva tuvo que retirarse. En la vuelta 36, el monoplaza del asturiano dijo basta por problemas en el chasis, descartando complicaciones con la unidad de potencia.
Anteriormente, en la salida, el bicampeón del mundo conseguía remontar desde la decimotercera hasta la novena posición, mientras veía cómo Sainz, que iniciaba la cita undécimo, caía hasta la decimonovena plaza por la elección de las gomas. Además, el 'virtual safety car' hacía su aparición tras un toque del mexicano 'Checo' Pérez (Force India) a Lance Stroll (Williams) que terminó con el canadiense fuera de carrera. En la vuelta 4, el italiano Antonio Giovinazzi (Sauber) también se despedía tras sufrir aquaplaning y destrozar su coche contra las defensas.
La cambiante climatología china y los diferentes estados de la pista obligaron pronto a Mercedes a entrar a boxes para cambiar a neumáticos de seco; sin embargo, el finlandés Valtteri Bottas (Mercedes) trompeaba y caía hasta la décima posición. Todo lo contrario que Verstappen, que era capaz de superar a los dos Ferrari e incluso lograba ponerse segundo tras adelantar a Ricciardo.
Era aún temprano cuando McLaren empezó a sufrir problemas. El belga Stoffel Vandoorne, con problemas con el combustible, se despidió a falta de 39 vueltas junto al ruso Daniil Kvyat (Toro Rosso). Los compañeros de los españoles se quedaban a la vez fuera de competición.
En la cabeza de carrera, Hamilton no sufría y manejaba su renta. Por detrás, los Ferrari y los Red Bull luchaban por las posiciones de podio, mientras que Bottas estaba prácticamente descartado de la pugna. Vettel logró alcanzar la segunda plaza al poco tiempo, aprovechando que la pista se iba secando. Sainz, por su parte, competía por libre y avanzaba al adelantar a Alonso, que justo después comunicaba por radio que su coche no respondía.
Finalmente, el inglés se llevó la victoria por delante de Vettel y Verstappen, que ahora es tercero en el Mundial (25 puntos) por detrás de los dos primeros y con dos unidades de ventaja sobre Bottas, que este domingo terminó sexto. Ricciardo fue cuarto y el finlandés Kimi Raikkonen (Ferrari), quinto.