Ambos conjuntos llegaban de nuevo a la final de la competición como ya hicieron en el anterior torneo de la Liga Promises disputado en Vila-real. Sin embargo, en esta ocasión fue el equipo azulgrana el que consiguió la victoria al derrotar al cuadro hispalense por 5-2.
Poco acierto de cara a portería en la primera mitad, que acabó con un 0-1 para los sevillistas gracias a Alberto Ulloa, que aprovechó un rechace del guardameta azulgrana para hacer el primer tanto del encuentro.
Tras el paso por los vestuarios, los azulgranas salieron con una marcha más y poco tardaron en igualar el marcador. Lo hicieron por inmediación de Alejadro Balde, quien convirtió en gol una falta directa. El conjunto catalán no tardó en adelantarse en el electrónico gracias a los tantos de Arnau Fardós de cabeza, y Saidou después de tacón, que sirvieron para poner el 3-1.
Eric Vega logró hacer el cuarto para el FC Barcelona cabeceando en el segundo palo un saque de esquina, mientras que los sevillistas acortaron distancias con el tanto de Ángel Mancheño. No fue suficiente para evitar que el equipo catalán se hiciera con el triunfo, y en los últimos minutos del encuentro, Marc Pelaz puso la guinda al partido, tras anotar el 5-2 definitivo, que convertía a los azulgranas en campeones del torneo.