"Nos hemos adaptado muy bien a su forma de trabajar, gusta hacerlo con alguien que vive así su profesión y transmite sus ganas a los jugadores. Estamos encantados con él. Hemos metido mayor intensidad en los partidos y repito, es mucho por querernos ganar nuestro lugar y querer llegar a Liga de Campeones al final de temporada", manifestó en rueda de prensa.
Para el mexicano, ha sido clave la voluntad de gustar a Pizzi en la mejora del equipo. "Siempre queremos demostrar al entrenador que puede contar con nosotros y básicamente es lo que ha pasado estas dos semanas. El míster tiene su parte de culpa, por venir y meternos más intensidad, pedirnos las cosas con más claridad de lo que quiere, nosotros hemos cambiado el chip", celebró.
"Lo primero que nos dijo es que lo más importante es mantenerse, y tenemos esto en la cabeza. Es bueno que el responsable del equipo te lo diga desde el primer día. Va a ser bueno para que ninguna se desconecte ni piense que basta con lo hecho en estos dos partidos para lo que viene. Queremos estar más arriba en la tabla y hay que ganar fuera", recalcó.
De todas formas, defendió que con Djukic también había actitud. "Los jugadores siempre hemos tenido una buena actitud. Con Djukic, se hablaba que solo cuando había ultimátum ganábamos pero actitud siempre hubo, ahora somos capaces de sacar los partidos y más allá de resultados tener otra cara. Ir arriba es el objetivo principal pero paso a paso. Tenemos un partido importante contra el Celta en su casa, será muy complicado", matizó.