Las dos carreras absolutas tuvieron un claro dominio africano y, por ello, cumplieron con la tradición del palmarés de la carrera. En hombres, por segundo año consecutivo hubo triunfo ugandés, con una soberbia exhibición de poderío de Timothy Toroitich (29:58). En cuanto a las mujeres, la keniata Mercy Cherono (27:38) impuso su calidad con autoridad. Bezabeth, que se mostró muy ambicioso, acabó cuarto, mientras que Paula González acabó en sexta posición.
En la prueba masculina, los favoritos comenzaron siempre marcando el ritmo de carrera. El campeón del mundo, Japhet Korir, quiso dejarse ver en los primeros compases, imponiendo un ritmo que poco a poco iba a ir haciendo una importante selección en la cabeza. En la segunda vuelta la carrera se rompió, y por delante quedaron los mejores africanos, con Teklemariam, Toroitich, Emmanuel Bett -campeón de 2012 en Soria-, Korir, Tsegay y un ambicioso Bezabeth quien marchaba con soltura en la tercera posición.
A partir de la tercera vuelta Toroitich cambió de ritmo, se marchó en solitario y el resto de africanos cedieron unos metros, mientras Korir y Tsegay poco a poco se iban a dejar caer perdiendo opciones de triunfo. En los últimos metros Toroitich, muy fatigado, todavía marchaba en cabeza, aunque Teklemariam apretaba los dientes decidido a darle caza al igual que Emmanuel Bett, con algunos problemas en la rodilla.
Finalmente las fuerzas no dieron para más, Toroitich cruzaba primero la línea de meta, revalidando el triunfo ugandés. A tan solo unos segundos concluyó el eritreo Teklemariam Medhim, mientras que Emmanuel Bett se tuvo que conformar con repetir podio. Bezabeth finalizó cuarto, aunque también destacó la figura del español Mohamed Marhoum, séptimo, y del soriano Daniel Mateo, octavo.
BUEN PAPEL DE LAS EUROPEAS EN CATEGORÍA FEMENINA
La keniata Mercy Cherono fue la vencedora femenina en una demostración de autoridad con respecto a su compatriota Doris Changeywo y la portuguesa Catarina Ribeiro, que completaron el podio de la prueba. Las españolas Paula González, Teresa Urbina y Blanca de la Granja, finalizaron sexta, octava y novena, respectivamente.
Las keniatas eran las grandes favoritas pero las corredoras europeas no se arrugaron en ningún momento. Es más, la polaca Kate Kowalska fue una de las primeras en liderar la cabeza y tirar de galones. Conforme fueron avanzando los giros, las africanas se quedaron con las europeas, que seguían tirando del grupo con valentía. La italiana Elena Romagnolo cogía ahora el relevo al frente del grupo y mantenía viva la carrera, mientras aguantaban la polaca y la portuguesa Catarina Ribeiro.
Sin embargo, se cumplieron los pronósticos: Cherono no quiso complicarse la carrera y decidió atacar pasada la segunda vuelta. Changeywo fue la única capaz de responder a su ataque, si bien es cierto que la diferencia con respecto a su compatriota iba a ir en aumento. Por detrás, Catarina Ribeiro y Kate Kowalska también tenían piernas y, en este orden, finalizarían la prueba.