Iglesias lleva toda una vida dedicada a la halterofilia, desde que a principios de los años sesenta, tras haber probado deportes como el atletismo o la gimnasia deportiva, se encontrase con el deporte al que denomina como su "pasión".
Su andadura como levantador de pesas comenzaría en la Universidad de Salamanca, donde estaba, y está, el club al que pertenece, el C.D.U.S., con el que llegó a conseguir alguna medalla en Campeonatos de España de forma individual, cuando por aquellos entonces todavía se competía en categoría de Fuerza y no en las modalidades actuales de Arrancada y Dos Tiempos.
Pasados unos años, Iglesias toma las riendas del club, convirtiéndose en su entrenador y, tras haberse formado tanto a nivel español como a nivel internacional, ha aportado una docena de levantadores al equipo nacional, además de haber conseguido estar presente en 37 Copas del Rey.
Una vida por y para la halterofilia y que "seguirá siendo así hasta que las fuerzas decaigan, porque las ganas nunca faltarán", declaraba el propio nuevo presidente.