En un artículo de opinión en el que analiza las razones que, a su juicio, llevaron a que Japón lograse ser elegida como sede de los Juegos Olímpicos de 2020 y que Madrid quedase fuera, Sánchez considera que el Comité Olímpico "dejó claro, igual que una inmensa mayoría de la sociedad" que las políticas basadas en la austeridad "no resultan atractivas, a pesar de lo que se quiera 'vender' por parte de los dirigentes".
El experto apunta que la concesión de los Juegos Olímpicos de 2020 a la capital nipona "no es una sorpresa" ya que su propuesta "era más atractiva y mejoró notablemente desde hace cuatro años", cuando, igual que Madrid, había sido eliminada. A su juicio, desde el punto de vista del olimpismo, jugaron a favor de la candidatura de Japón aspectos como "la rotación continental, las aspiraciones europeas de ser sede en 2024 y un tema clave, como se demostró, que es el dopaje".
En todo caso, cita los factores económicos como sus "argumentos más potentes", aludiendo a la presentación de un proyecto con una combinación "solvencia-grandiosidad, a años luz de las otras dos ciudades candidatas" y teniendo en cuenta que Japón es la tercera potencia económica mundial y "sus síntomas de recuperación dejaron de ser promesa para ser una realidad".
Sobre la propuesta madrileña, destacó que "la cuestión determinante para la baja concepción" de ésta fue el aspecto económico, pues la apuesta por la austeridad no resultó atractiva; aunque también señaló otras "debilidades" como la "situación y percepción exterior del tema del dopaje, donde la 'Operación Puerto' causó tanto daño", y el hecho de que el proyecto olímpico presentado "poco se diferenciaba" del defendido en anteriores convocatorias.
Finalmente, Sánchez concluye que la apuesta por el deporte "debe continuar" e incluso "fortalecerse" y ha abogado por que el componente económico se presente como determinante en la planificación deportiva del país.