La nadadora de Badalona consigue así su primera medalla de oro, la cuarta presa en total, de los Europeos y revalida el título que ya ganó en Barcelona 2012. Además, ha sido la única capaz de bajar de los 16 minutos (15:57:29).
La catalana supo reservarse y aguantar hasta que marcó un cambio de ritmo a la llegada a los 1.100 metros; desde entonces, abrió un hueco de tres segundos sobre su principal rival, la húngara Boglarka Kapas, que se colgó la medalla de plata (16:03.04).
A las dos nadadoras las acompañó en el podio la italiana Martina Rita Caramignoli, que lideró la primera mitad de la prueba pero que se acabó consolando con la presea de bronce, a más de ocho segundos de Belmonte (16:05.98).
Por su parte, la otra española en la final, María Vilas, arriesgó desde el inicio, pero fue bajando la intensidad a medida que se desarrollaba la prueba; sexta en los 900 metros, las opciones de la gallega se fueron esfumando para concluir en séptima posición (16:22.48).